En tan solo 20 años, Quintana Roo ha visto un aumento de población permanente de 112.3%.

Es decir, en el año 2000, se registraron 849,963 personas viviendo en el estado.

Para el año 2020, este número había aumentado a 1,857,985. Esto ha sido propulsado por el crecimiento de la zona, y por ende, la gran oferta laboral que se ha generado para gente tanto nacional como extranjera.

Aunado a esto, la pandemia de COVID-19, también abrió la puerta para que mucha gente hiciera la Riviera Maya su hogar y oficina.

Con el incremento de la población de nómadas digitales, o gente que tuvo oportunidad de trabajar desde casa, muchos decidieron hacer base aquí.

Por sus hermosas playas, impresionante naturaleza, y su amable y vibrante comunidad.

Es por todo esto, que la demanda por rentas a largo plazo se ha visto beneficiada en los últimos años, y es algo a lo que ahora prestan atención inversionistas que quizá antes solo pensaban en rentas vacacionales por el ROI que este genera.

Las Ventajas de Invertir en una Renta a Largo Plazo

Cuando inviertes en un inmueble en la Riviera Maya pensado para rentas a largo plazo, te abres posibilidades de buscar una propiedad en ubicaciones un poco más “alejadas” de la parte turística.

Pues al final del día, estas buscando brindarle un hogar fijo o permanente a alguien que aunque atraído por la belleza de la zona realmente viene a hacer una vida aquí.

Esto te dará la posibilidad de encontrar más opciones, a veces más económicas para invertir, y en zonas residenciales con mucho potencial y plusvalía por su ubicación.

Tus potenciales inquilinos pueden variar desde jóvenes recién egresados, personas en busca de nuevas oportunidades, o bien parejas o familias que buscan establecerse en un nuevo lugar.

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Estabilidad Financiera

La respuesta fácil es sí. Playa del Carmen continúa viendo patrones de crecimiento estables y el interés en la región continúa siendo alto.

Cada día hay más y más opciones para invertir en lo que una vez fue un pueblo pesquero, y los precios, estilos, y opciones existen para todo tipo de presupuesto, inversionista y necesidades.

Mantenimiento

También te reducirá los gastos de mantenimiento.

Esto es algo que negociarás con el inquilino, pero si tu propiedad se encuentra en un condominio o residencial, es probable que tengas que pagar una cuota mensual por el mantenimiento de las áreas comunes (como jardines, alberca, o seguridad).

Al ser estas de uso para tu inquilino, es algo que puedes incluir como parte de la renta, aumentando un poco el valor de esta. Así, te despreocupas de hacer tú esos pagos mensuales.

Amueblar o No Amueblar

Un gran gasto que conllevan las inversiones es el amueblar y equipar la propiedad previo a la renta.

Sin embargo, si se trata de una renta a largo plazo y buscas inquilinos estables que estén haciendo su vida y patrimonio, puedes rentar sin amueblar, creando un ahorro importante en tu inversión.

Aún así, debes de considerar que si estás rentando a jóvenes estudiantes, recién egresados o que apenas inician su vida, es más fácil que renten una propiedad amueblada. Esto dependerá de ti.

Protección Contra Daños

Cuando rentas a largo plazo, a comparación de una renta vacacional, te puedes proteger cobrando un depósito equivalente al monto de un mes de renta.

Con este depósito, puedes pagar reparaciones o daños que tu inquilino pueda causar.

Esto queda establecido previamente en el contrato. Sin embargo, si no hay daños a tu propiedad, este monto debe ser devuelto al finalizar el contrato, así que siempre guárdalo en un lugar seguro.

Utilidades y Servicios

Tú podrás decidir si cubres dentro de la renta los servicios de agua, luz, gas e Internet, o prefieres que tu inquilino los pague por su cuenta.

Si lo incluyes, por supuesto, podrás inflar la renta que cobras, puesto tendrás tú que cubrir este gasto mes a mes.

En este caso, es recomendable limitar la cantidad de agua y electricidad que pueden gastar por contrato, para evitar tener que pagar cuentas demasiado altas por descuidos de tu inquilino.

Las Desventajas de una Renta a Largo Plazo

Siempre hay que poner toda inversión en una balanza.

Pues aunque todo lo anterior es muy bueno y positivo para una inversión de renta a largo plazo, también debes de considerar las desventajas de esto.

La primera y más importante, es que no podrás disfrutar tú de tu propiedad mientras la esté ocupando tu inquilino.

Si buscas realmente una propiedad que puedas usar ocasionalmente de vacaciones, no te recomendamos invertir en una renta a largo plazo.

Encontrar el inquilino perfecto también puede ser algo difícil.

Te recomendamos que pidas referencias, lo entrevistes y no tengas miedo a establecer reglas y ser estricto con ciertas limitaciones.

Al final de todo, estás protegiendo tu patrimonio y asegurándote de que encuentres a alguien que realmente cuide tu casa como si fuera propia.

Como dijimos al principio, la Riviera Maya se ha vuelto un destino muy atractivo para personas que buscan quedarse por más tiempo, ya sea por trabajo o por facilidad y flexibilidad en su trabajo desde casa.

El crecimiento de la zona es importante y pinta un panorama muy favorable para alguien que busca invertir en rentas a largo plazo.