Llamada
+52 984 195 5003Llamada
+52 984 195 5003Enviar correo
info@mayaocean.comagosto 4, 2021
Comprar una casa se dice fácil, al menos que cuentes con la liquidez total del valor de la propiedad de tu interés, deberás de apoyarte con el mejor crédito hipotecario para solventar el gasto y poder pagarlo a un mayor plazo de tiempo.
Tener casa propia es una meta que muchos desean cumplir en su vida adulta para crear un patrimonio y tener una sensación de pertenencia.
Según un estudio de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y de Citibanamex del 2019, 47% de los jóvenes mexicanos buscan comprar una casa a mediano plazo.
Pero, ¿Cómo eliges la mejor opción de crédito hipotecario para ti?
Antes de ponerte a buscar y comprar opciones, es importante que conozcas el estado actual de tus finanzas.
Deberás definir cuánto puedes dar de enganche, considerando que muchas instituciones no dan más del 70 o 90 por ciento del valor total de la propiedad que quieres comprar.
Prepárate y revisa si tienes el monto suficiente para cubrir el resto de eso en el enganche, y además asegúrate de que tengas suficiente para cubrir los gastos adicionales que conlleva una compra.
Esto incluye seguro, escritura, Notario Público, impuestos de compra, entre otros.
También es importante que conozcas tu estadio financiero mensual.
Es decir, cuánto ingreso neto tienes al mes y cuánto gastas.
Con esto, podrás calcular cuál es el monto máximo que puedes pagar cada mes.
Recuerda que se recomienda que el pago de tu hipoteca no sea mayor al 30% de tus ingresos para que puedas controlar la deuda y liquidar dentro del plazo establecido que contrates con tu crédito.
Conociendo tus finanzas, podrás definir tus necesidades dentro de un plano realista.
¿Qué buscas en la casa de tus sueños? Estima el número de habitaciones, si necesitas un jardín o patio, si buscas departamento o casa, con qué instalaciones, etcétera.
Además, deberás de considerar ubicación, infraestructura, cercanía a puntos de tu interés, entre otros.
Con esto, podrás establecer un rango de presupuesto de acuerdo a tus finanzas que estés dispuesto a invertir, y podrás comenzar la búsqueda de opciones inmobiliarias dentro de este presupuesto.
Quizá pienses que quieres una casa totalmente nueva, pero descubrirás que una casa seminueva que está en reventa, cubra con tus necesidades dentro del presupuesto que tienes.
Pero también considera que una casa que no sea nueva, pueda necesitar otros gastos de mantenimiento, reparación o mejora que deberás considerar en tus gastos fuera del crédito.
Ahora sí, empieza la búsqueda del mejor crédito hipotecario para ti.
Conociendo tus finanzas, teniendo un presupuesto y sabiendo las necesidades que tienes y qué estás dispuesto a sacrificar, puedes acercarte con instituciones financieras a conocer qué créditos tienen disponibles para ti.
No te cases con la primera opción que se te cruce. Haz tu debida diligencia y estudia las cláusulas, ventajas y desventajas de los créditos con distintas instituciones financieras.
Algunas cosas importantes a considerar al momento de decidirte por un crédito son:
Considera que los bancos suelen manejar plazos máximos de 20 años, pero pueden otorgarte un limitante de hasta 5 o 10 años, dependiendo de tu edad, estado financiero, y estatus de tu historial crediticio.
El Infonavit (Instituto del Fondo Nacional de Vivienda para los Trabajadores), otorga plazos de hasta 35 años.
Pero recuerda que mientras mayor el plazo, mayor el interés que terminas pagando, y por ende, mayor tu deuda.
También considera que mientras menor el plazo, mayor el pago mensual, dependiendo del monto del crédito, pero menor el monto total que terminas pagando incluyendo intereses.
Las tasas de interes varían de institución a institución, sin embargo, para las hipotecas bancarias, en promedio se trata de un 10 por ciento.
Si usas tu crédito del Infonavit, considera una tasa de 12 por ciento.
Pero no solo se trata del porcentaje de la tasa, si no del tipo de tasa que te ofrecen.
Existen tasas fijas que se mantienen igual durante todo el periodo del crédito, que son las más recomendadas.
Las tasas variables son más riesgosas, pues dependen de la volatibilidad del estado económico del país y puede existir un severo aumento en ellas en cualquier momento.
Cada institución financiera tiene variables que deberás de comprar, junto con todo lo demás, para decidir cuál se acomoda más a ti.
Revisa cosas como comisión por apertura, por administración, penalización de pagos anticipados, opción de hacer pagos a capital, entre otros.
Las letras chiquitas pueden esconder beneficios como premios y recompensas por pagar puntualmente.
Esto puede variar desde exento de algún pago mensual, reducción de tasa de interés, entre otros, que pueden reducir el costo total de tu crédito hipotecario.
Pero aquí también encontrarás las condiciones, términos y obligaciones a las que te comprometes al firmar el contrato.
Es importante que sepas cuáles son tus derechos y obligaciones dentro del plazo establecido.
Existen muchas otras variantes que deberás de considerar, como si el seguro va incluido y financiado, o tendrás que pagar anualmente en una sola exhibición.
Existen ciertos periodos en los que los bancos ofrecen beneficios como eliminar la comisión por apertura.
Es importante que investigues y hables con tu ejecutivo para saber cuáles beneficios tiene de los que puedas tomar ventaja para ahorrar.
La mayoría de las instituciones financieras te piden lo mismo (salario comprobable, historial de crédito, capital inicial, identificación, comprobante de domicilio, entre otros); pero puede haber variaciones y es importante que conozcas para decidir cuál te conviene.
Al final de todo, se trata de hacer tu debida diligencia y de conocer tus derechos, obligaciones y situación financiera antes de dar el salto a este compromiso.